El jardín de mariposas del Museo Nacional de Costa Rica es un oasis en pleno San José. Es la primera exhibición que disfrutan los visitantes en su recorrido, en donde pueden apreciar 28 especies de mariposas y variadas plantas hospederas y productoras de néctar.
Vuelo Multicolor
Entre la multitud de hojas, si mira con atención, podrá sorprenderse con las larvas que se refugian discretamente. Podrá apreciar diversos tipos de crisálidas que, día a día y lentamente, se transforman hasta abrir las alas para volar, convertidas en mariposas multicolores.
También podrá conocer las distintas fases de la metamorfosis de estos efímeros insectos. Aquí es posible observar huevos, pupas, larvas, crisálidas, mariposas “recién nacidas” o, mejor dicho, recién salidas de su crisálida, mariposas tomando el sol, alimentándose o alzando el vuelo.
Son casi 1000 metros cuadrados, protegidos por una infraestructura que atestigua uno de los hechos históricos más relevantes de nuestro país, la abolición del Ejército Nacional. Caminará junto al muro de ladrillo en donde, el entonces presidente de la República, José María Figueres Ferrer -Don Pepe- dio un mazazo como acto simbólico del cese de operaciones militares del ejército costarricense en 1948.
El jardín cuenta con accesibilidad total para los visitantes, en cumplimiento con la Ley 7600, Ley de igualdad de oportunidades para las personas con discapacidad.
Conocer y apreciar la naturaleza
El propósito de este “laboratorio natural” va más allá del deleite visual, pues es un excelente recurso educativo para docentes, padres y todos los interesados en las mariposas. Es un aula abierta para aprender de manera vivencial sobre la naturaleza y el ciclo de la vida de estos insectos.
Uno de los objetivos es fomentar la siembra y protección de plantas hospederas que atraen mariposas, a su vez que les brindan alimento y refugio, contribuyendo con su ciclo biológico.
En los paneles informativos, encontrará detalles sobre las mariposas y sus principales plantas hospederas, alimentación y, lo más importante a saber, su corto pero importante ciclo de vida. Las pupas están a la vista del público, por lo que podrá apreciar las etapas de su desarrollo.
Es importante destacar que las mariposas que se muestran son especies nativas del Valle Central de Costa Rica, esto con el fin de no introducir especies nuevas que vayan a desequilibrar el ambiente.
Cuando lo visite, tómese el tiempo para leer la información y observar cada rincón, pues en donde menos lo espera, es posible encontrar diminutos huevecillos, larvas devorando hojas o mariposas alimentándose de frutas o néctar de las flores. Y sin duda, hay que detenerse en la zona las pupas, por ser una constante “sala de nacimientos”, donde nuevos seres se asoman a la vida cada día.
Plantas y Mariposas del Jardín
El jardín es un ecosistema con condiciones físicas y biológicas ideales para la reproducción y sobrevivencia de las mariposas.
La población de mariposas está conformada por especies tanto de bosque como de áreas abiertas. Del bosque están la morfo (Morpho helenor), la payasito (Catonephele numilia), la hecalita (Heliconius hecale), entre otras. De las áreas abiertas podemos destacar a la naranjita (Dryas iulia) y a la colipato amarillo (Heraclides thoas).
La población de plantas está integrada por hierbas, arbustos, árboles, bejucos y viboranas. Entre ellas hay 8 especies de plantas hospederas, 6 plantas productoras de néctar y diversidad de plantas para ambientación.
Entre las plantas hospederas están los bejucos como las pasifloras o flores de pasión, las aristoloquias o patitos. También hay árboles como el sangrillo, el chaperno, el targua y el guarumo. En el grupo de las plantas productoras de néctar figuran los arbustos como el camarón rojo, el botón de oro, la gavilana, el camaroncillo y el indispensable rabo de zorro; además de hierbas como las chinas, el cambrai, la viborana y la pata de gallo.