En la época precolombina antes de la llegada de los españoles, la organización política más compleja y extensa eran los cacicazgos, a la cabeza de la cual estaban los caciques. Con la llegada de los españoles, en el siglo XVI las sociedades las sociedades indígenas sufrieron una gran catástrofe demográfica producto de las enfermedades y de la explotación. 

El largo período colonial se enfrentó a su fin en 1821, cuando se vivió la independencia, y el Costa Rica, igual que muchos de los países de América Latina se enfrentaron a conflictos internos y a la búsqueda de una nueva forma de organización política. Es así como en los albores del siglo XIX, se dio el proceso de estructuración y fortalecimiento de un poder central frente a los poderes locales, y a finales de ese, también conllevó que el Estado liberal demostrara su poder frente la Iglesia Católica. El siglo siguiente vio como poco a poco el Estado fue ampliado sus funciones, sobre todo después de la década de 1940, cuando se sentaron las bases del Estado Benefactor que se enfrentará a una profunda crisis a inicios de la década de 1980, lo que todavía dibuja un panorama incierto para el país.