Un sitio arqueológico con preservación excepcional

Recibir denuncias por saqueo ilegal de monumentos o sitios arqueológicos es común en el Museo Nacional de Costa Rica, por eso no era de extrañar aquella que recibimos a inicios de 2018 en el Departamento de Antropología e Historia, pero este sitio quizá tenía algo diferente.

Poco antes, el arqueólogo Juan Vicente Guerrero, había entregado varios artefactos prehispánicos hechos de madera; un asiento, una punta de flecha y dos palitos cilíndricos con cortes rectos en sus extremos. La madera, es un material que comúnmente no se conserva en nuestro país debido a las condiciones climáticas y estos objetos, supuestamente habían sido extraídos en la banda occidental del golfo de Nicoya, cerca de Paquera, Puntarenas.

Allá fuimos con dos objetivos principales: detener el huaqueo y comprobar si ese lugar era el mismo de donde se habían extraído los objetos de madera que, extrañamente, presentaban una condición excepcional de preservación.

Punta de lanza de madera

Punta de lanza de madera del sitio arqueológico Huiscoyol. Fotografía de Juan Carlos Calleja.

Enterramientos extendidos

Enterramiento extendido. Sitio arqueológico Huiscoyol.

Las excavaciones permitieron definir dos ocupaciones humanas sobrepuestas y diferenciadas. Durante el último momento de ocupación, parece ser que el área que ocupa el sitio se empleó como zona funeraria. Allí se encontraron 37 enterramientos humanos y más de 120 objetos ofrendarios que fueron colocados por los parientes como parte del ajuar funerario. Fechamientos con el método del C14 indican que el cementerio pudo estar en uso entre el 544 y el 205 antes de la época de Cristo, aunque es posible que algunas tumbas se colocaran después.

La cerámica fue uno de los bienes que más se registró dentro de los objetos ofrendarios que los parientes colocaron en las sepulturas; la misma es monocroma y con decoraciones sencillas. Se encontraron también, más de 10 metates trípodes con soportes cilíndricos y de plato rectangular que presentan decoraciones (posiblemente aves) bajo el plato, con un diseño que no parece ser muy frecuente en la zona.

Diferentes objetos elaborados en piedras, dientes y colmillos de animales, resina y posiblemente conchas, se encontraron como adornos corporales, formando parte de colgantes o cuentas de collares. En la mayor parte de los casos estos objetos, se encontraron colocados en enterramientos de infantes y niños que los llevaban puestos cuando fueron enterrados.

Los trabajos desarrollados no permitieron encontrar objetos confeccionados con madera, como los que entregaron a Guerrero, sin embargo, otras evidencias encontradas en el sitio, nos hacen pensar que este es el lugar de donde se extrajeron esos objetos excepcionales.

Una ocupación humana más antigua se encontró bajo los enterramientos de algunas de las excavaciones. Esta ocupación se caracteriza por la presencia de concheros, estos son depósitos o acumulaciones de conchas desechadas producto de la extracción del molusco para su consumo, en los cuales también se encontraron restos de huesos de animales, tanto mamíferos terrestres como peces y aves. Según fechamientos de C14 esta antigua ocupación podría rondar fechas tan tempranas como los 3500 años antes de la época de Cristo. Estos fechamientos convierten a Huiscoyol en el lugar con los concheros y la ocupación humana más antigua en la costa del país.

Según las investigaciones realizadas, Huiscoyol, estuvo en algún momento, en la línea de costa o cerca de la zona intermareal. Procesos geológicos en los últimos 2000 años parecen haber causado el desplazamiento y la elevación del terreno hasta los 50 metros sobre el nivel del mar en que se encuentra el sitio en la actualidad.

Es probable que la conservación de los objetos de madera y otros restos orgánicos observados, se deba a que el lugar estuvo inmerso entre capas de barro del manglar y posteriormente algunos de los enterramientos han estado sumergidos en agua producto de un alto nivel freático del terreno.

A la fecha, esta investigación se encuentra activa y esperamos que nuevas excavaciones planificadas para el futuro, permitan obtener información complementaria para explicar la conservación excepcional de objetos orgánicos y los procesos humanos que dieron origen a las evidencias culturales que ahora estamos encontrando.

Sitio arqueológico Huiscoyol

Enterramiento en el sitio arqueológico Huiscoyol

AUTOR: Felipe Solís Del Vecchio
Arqueólogo

Departamento de Antropología e Historia
Museo Nacional de Costa Rica
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