FRANCISCO MORAZÁN
(Tegucigalpa, 1792 – San José, 1842)
Jefe de Estado de abril a setiembre de 1842
Aprovechando la oportunidad que le brindaba el malestar en Costa Rica por las medidas dictatoriales de Braulio Carrillo, y, contando con la complicidad de un grupo de enemigos de este, el general hondureño Francisco Morazán desembarcó en Caldera en abril de 1842 al mando de una tropa de 500 salvadoreños.
Tomó el poder valiéndose de una traición: firmó un pacto para unir sus tropas al ejército de 700 hombres, dirigidos por Vicente Villaseñor,
general enviado por Carrillo para contener a Morazán. Este pacto se conoce como “El Jocote”, lugar donde se reunieron ambos conspiradores.
Frente a esa adversidad, Carrillo se apartó del mando y salió del país rumbo a El Salvador, donde poco tiempo después murió asesinado por un enemigo personal.
Restablecida la situación después de la caída de Carrillo, una Asamblea Constituyente nombró a Morazán Jefe Supremo provisional del Estado, pero su figura resultó contraria a las tradiciones “civilistas” de los costarricenses. La solicitud de
contribuciones extraordinarias con fines bélicos, consecuentes con una Centroamérica en permanente lucha, fueron elementos extraños a nuestra idiosincrasia y sirvieron como detonantes para la sublevación popular.
A las 2 de la madrugada del 11 de setiembre de 1842 se levantó Alajuela al mando del general Florentino Alfaro y 6 horas después el pueblo josefino, al mando del general Antonio “Tata” Pinto. Tras violentos combates, Morazán logró huir el 14 de setiembre hacia Cartago, donde fue capturado. El 15 de setiembre de 1842, Morazán fue fusilado en San José. Dice la tradición que fue fusilado de frente, mientras que Villaseñor fue fusilado por la espalda, como traidor.
Años después, en 1887, Costa Rica dignificó la memoria de Morazán, bautizando con su nombre uno de los principales parques de la capital.
Principales acciones de su gobierno
Francisco Morazán derogó la “Ley de Bases y Garantías”, promulgada por Braulio Carrillo en el año 1841 y declaró a Costa Rica como parte de la Federación Centroamericana, en un intento por reconstruir la República Federal.
Convocó una Asamblea Constituyente, la cual puso en vigencia la Constitución de 1824 y con ello restauró las garantías individuales.
Deseoso de restablecer la Federación, se preparó para invadir Nicaragua. Para ello su gobierno impuso un caro empréstito interno que lo enfrentó de inmediato con las clases propietarias. Todo esto hizo estallar la rebelión contra Morazán.